Una comunidad está consternada por un caso insólito que realizó una mujer, luego de que informaran que habían profanado una tumba, pero no para robar o hacer cosas malas con el difunto que había muerto tres meses atrás.
El inusual y perturbador caso generó conmoción, luego de que una mujer ingresara al cementerio local y profanara la tumba de un hombre identificado como Diego Expedito Moreno Rojas, quien había fallecido en julio de 2025.
Según versiones, la mujer llegó al camposanto en horas de la tarde y, tras ubicar la tumba, retiró la lápida, abrió el ataúd y comenzó a bañar y cambiarle la ropa al cadáver, asegurando que quería verlo “arreglado y limpio”.
Algunas personas que fueron testigos del hecho, relataron que la mujer hablaba con el cuerpo sin vida, le mostraba prendas nuevas que habría comprado y le expresaba palabras de cariño, como si se tratara de una visita normal.
Sin embargo, señalaron que se desconoce si la mujer tenía algún vínculo familiar, sentimental o de otra índole con el fallecido, que lo sacó de la tumba para ponerle ropa nueva.
Movimientos extraños
De acuerdo a medios de comunicación, el encargado del cementerio, quien se encontraba incapacitado por quebrantos de salud, fue alertado por vecinos que notaron movimientos extraños dentro del cementerio. Al llegar, grabó parte de lo sucedido como evidencia, sorprendiendo a la mujer en pleno acto.
Pese a que intentó persuadirla para detenerse, esta reaccionó exaltada. Fue necesaria la intervención de la Policía del municipio, que acudió al lugar y logró controlar y retirar a la mujer, mientras realizaba la extraña “ceremonia” con el difunto.
Investigan el caso
La mujer fue trasladada para su identificación y valoración médica, pues se presume que podría sufrir alteraciones psicológicas o emocionales, para llevar este tipo de actos inusuales que dejó perplejos a la comunidad del municipio de Landázuri, departamento de Santander.
Es así que las autoridades deberán determinar si se configura el delito de profanación de sepultura, el cual está contemplado en la legislación colombiana como un delito contra el respeto debido a los muertos.
Tras lo ocurrido, ha generado todo tipo de críticas de rechazo, asombro e inquietud entre los habitantes de Landázuri, que aún no salen del impacto por la escena. Algunos pobladores aseguran haber visto a la mujer deambulando en días anteriores por la zona del cementerio.
